Al sufrir un accidente de tráfico se pueden sufrir tanto daños personales como daños materiales. Comprender la diferencia entre ambos, qué tipo de lesiones o perjuicios implican y durante cuánto tiempo, es fundamental si se quiere obtener la indemnización más justa por el accidente sufrido.
Existen dos tipos de conceptos por los que se puede recibir una indemnización tras un accidente de tráfico:
los daños personales y los daños materiales. Entender qué puede catalogarse como daño personal o material y cuándo esos daños son indemnizables será fundamental de cara a obtener la máxima indemnización posible por accidente de tráfico.
La Ley de Responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos a Motor introdujo los conceptos indemnizables en un accidente de tráfico mediante el Real Decreto Legislativo 8/2004, del 29 de octubre, diferenciando ambos tipos de daños en su naturaleza y en su criterio de responsabilidad.
¿Cuáles son los daños materiales en un accidente?
Los daños materiales son lo que se refieren a
los desperfectos que pueda sufrir tanto el vehículo siniestrado como los objetos que había en su interior en el momento del accidente, y siguen el principio de responsabilidad por culpa. Es decir, se deberá probar quién fue el responsable del accidente, pues será también el responsable (o su seguro) de la indemnización.
Dentro de estos daños materiales encontramos:
- El vehículo
- Efectos personales
- Gastos derivados (alquiler del vehículo de sustitución, desplazamientos, alojamientos, dietas provocados por el accidente)
¿Qué se consideran daños personales?
Por su parte, los daños personales incluyen
todos los perjuicios, tanto físicos, como psicológicos y patrimoniales, y tanto presentes como futuros, que pueda sufrir una persona como consecuencia del accidente.
Respecto a la responsabilidad, en este caso no será necesario probar la culpa del conductor del vehículo contrario y bastará demostrar que las lesiones sufridas son consecuencia de dicho accidente. Será por tanto el contrario, si no quiere ser el responsable de la indemnización, quien deba demostrar que la culpa fue del perjudicado con lesiones personales.
En cualquier caso la indemnización buscará, según el concepto jurídico
“restitutium in integrum”, restituir a la víctima al estado en el que estaba antes del accidente,
teniendo en cuenta todas sus circunstancias personales, familiares, sociales y económicas.
¿Cómo se calcula la indemnización por accidente?
Para ello, se tendrán en cuenta múltiples factores a la hora de calcular la indemnización por accidente de tráfico. La mayoría de ellos se encuentran en el
Baremo de indemnizaciones por accidente de tráfico, un extensísimo documento de más de 500 páginas publicado -y actualizado anualmente- en el Boletín Oficial del Estado.
Este baremo
abarca todas las posibles lesiones, secuelas y perjuicios consecuencia de un accidente de tráfico y
establece una horquilla de cantidades económicas con las que se debe indemnizar cada concepto, en función de una gravedad que deberá establecer un perito especialista en accidentes de tráfico.
La indemnización final, que será la suma de todas las indemnizaciones individuales, tendrá en cuenta factores como:
- Días de hospitalización y recuperación/curación de las lesiones sufridas
- Días impeditivos / no impeditivos para el desarrollo normal de la ocupación habitual de la víctima
- Secuelas permanentes
- Factores de corrección
¿Qué es un factor corrector?
Partiendo de la base de que no todas las personas presentan la misma condición física, laboral o económica, la indemnización no compensará a todas por igual. Los factores de corrección, por tanto, buscan
compensar económicamente a aquellas personas que, aún sufriendo la misma lesión o secuela, se van a ver mucho más afectadas que otras por el accidente (peor recuperación física, pérdida de ingresos a nivel laboral, etcétera).
Algunos de esos factores de corrección guardarán relación con el
tiempo de sanidad, es decir, el tiempo de recuperación de la lesión, y harán referencia a conceptos como daño emergente (gastos ocasionados por el accidente) o lucro cesante (el dinero que se deja de ganar durante la recuperación). El otro factor de corrección está relacionado con las
secuelas o incapacidades permanentes tras recibir el alta médica.
Calcular la indemnización por accidente
Días de baja, gastos médicos, daños materiales, daños personales, lucro cesante, secuelas, baremos de indemnizaciones, factores correctores… como vemos,
el cálculo de una indemnización por accidente de tráfico es una labor que requiere de un estudio y análisis minucioso, máxime si tenemos en cuenta que la indemnización total será la suma de las diferentes indemnizaciones individuales.
Por todo ello es altamente recomendable la participación de un abogado especializado en accidentes de tráfico.